El color y los tipos de orina han sido una de las formas más utilizadas para conocer el estado de salud de una persona desde la antigüedad. Gracias a ellos se pueden estudiar posibles afecciones de diversa índole, no solo renales o urinarias.
A través de la orina expulsamos cientos de desechos que el cuerpo no necesita y que provienen de todo lo que comemos y bebemos. Por tanto, la alimentación y la hidratación están directamente asociadas al color que tenga.
Los aspectos que se consideran son el color, la densidad, el olor y la presencia o ausencia de espuma para definir los diferentes tipos de orina. Por supuesto, esto sería a un nivel superficial, ya que un análisis de laboratorio es más exhaustivo.
Los colores y tipos de orina.
Es muy importante saber, al menos en términos generales, qué significan los diferentes tipos de orina sobre la salud. De esta forma, podremos detectar las señales que nos envía el cuerpo en caso de molestias y así podremos informar al médico sobre la irregularidad observada.
1 Translúcido o muy claro
Cuando la orina no tiene color o es muy clara, es un indicio de que estás bebiendo mucha más agua de la que necesitas, y que necesitas parar para no descompensar las sales del organismo. Si bien es cierto que los riesgos de beber agua en exceso son escasos, nadie está exento de sufrirlos.
Si el color es demasiado claro y la persona tiene necesidad de orinar con frecuencia, puede deberse a una intoxicación por agua o a una sobrehidratación. En cambio, si la tonalidad es clara, sientes ganas de orinar, pero no has ingerido mucho líquido, entonces podría indicar diabetes.
2 Clara, la orina perfecta
Una orina clara que no alcanza una tonalidad amarilla indica que el cuerpo está bien hidratado. Este color generalmente se toma como un signo de buena salud y es uno de los tipos de orina ideales.
3 Amarillo claro
El color amarillo claro también es señal de buena hidratación. Sin embargo, si el tono comienza a oscurecerse, volviéndose de color amarillo intenso, ámbar o marrón, esto es una indicación de que necesita beber agua.
Este color característico se debe a un pigmento llamado urobilina, que proviene del metabolismo de la hemoglobina. La orina normal transporta esa urobilina, que se diluye en agua y crea ese color amarillo casi transparente que indica que tenemos una hidratación adecuada.
4 Marrón o café
Uno de los tipos patológicos de orina es marrón. Puede ser producto de haber ingerido alimentos como frijoles, habas, ruibarbo o ciertos medicamentos. En el caso más extremo, este color puede indicar un problema hepático o una deshidratación severa.
5 Rosa, rojo y afines
Algunos alimentos que son de color rojo pueden causar cambios en el color de la orina y hacer que tenga un tono rosado o rojizo. El consumo de arándanos, ruibarbo, remolacha o cualquier alimento rojizo puede hacer que la orina cambie a este color.
Sin embargo, este color también puede deberse a ciertos medicamentos, o puede ser sangre. Generalmente, no debe tomarse como un signo de alarma, ya que puede significar hematuria (sangre en la orina) debido a una infección, cálculos renales, traumatismos o alguna patología maligna en las vías urinarias.
Por otro lado, estudios recientes establecen que la orina puede volverse morada en algunas infecciones bacterianas. Esta condición aparece en pacientes que utilizan catéteres o tubos. La coloración morada se debe a la combinación de pigmentos rojos y azules generados por bacterias.
6 Naranja
Consumir alimentos como moras (naranjas), remolachas, zanahorias o cualquier alimento anaranjado puede provocar otro tipo de orina y hacer que cambie momentáneamente de este color.
En algunos casos, puede indicar un problema con el hígado o las vías biliares, especialmente si se acompaña de heces de color claro. La deshidratación, que puede hacer que la orina se concentre y tenga un color mucho más intenso, también puede hacer que la orina se vea anaranjada.
7 Azul verdoso claro
A veces, la orina verde se produce durante las infecciones del tracto urinario causadas por la bacteria Pseudomona aeruginosa, siendo uno de los tipos de orina más alarmantes. Fuera de esto, también puede deberse al consumo de algún alimento, sobre todo si tenía un tinte azul o verde. Por ejemplo, los espárragos pueden hacer que la orina cambie de color.
Por otro lado, una tonalidad azul o verdosa también podría indicar que estás en proceso de cambio de vitaminas o medicamentos. Entre los medicamentos capaces de dar esta tonalidad a la orina destacan el propofol, la metoclopramida y la medicina tradicional china. Si ninguno de estos dos casos explica el tono azul verdoso, consulte a su médico.