Una empleada mientras estaba realizando la limpieza de una habitación en un hotel, descubrió algo peculiar en ese momento, vio algo extraño debajo de las sabanas que había en la cama.
Historia de Carly
Carly es una mujer de 41 años que lleva casi 4 años trabajando en un hotel llamado Lindenberg, ella realizaba su labor de limpiar las habitaciones cuando todos los huéspedes se iban de estas. Ya que se aseguraba de que quedaran ordenadas y limpias para cuando los nuevos huéspedes llegaran.
A pesar de que este no era el trabajo que ella siempre había querido, lo hacía con mucho gusto pues reunía para poder mudarse a California y así vivir con su tío. Solo le faltaba trabajar 1 año más para poder lograrlo.
El jefe le dijo a Carly que si podía limpiar la habitación 123, así que ella fue enseguida a realizar su labor. Ella luego de haber trabajado por 4 años en el hotel, pensaba que ya había visto de todo.
Mientras iba a la habitación ella solo pensaba “que desastre me habrá dejado las personas que se fueron, porque esto es un hotel barato”.
Cuando ingresó a la habitación, estaba se encontraba totalmente limpia, como si nadie hubiese estado allí la noche anterior. Carly salió de la habitación para ver si estaba en la correcta, pero si, decía 123.
Carly comenzó a acomodar la cama lentamente. Pero cuando quería quitar la funda, estaba se encontraba atascada debajo del colchón. De un solo tirón quito la funda y ella lo encontró fue una carpeta negra que no contenía nada adentro.
La agarro y la dejo en el suelo, mientras acomodaba a cama. Cuando finalmente se decidió en ver que había adentro, encontró un trozo de papel que tenía 4 dígitos. Y en la otra cara de la página había un logo del “Sheridan Trust Bank”.
Cuando le dio la vuelta a la carpeta, de esta se cayó una tarjeta. Comprobó la tarjeta en su teléfono y vio que se encontraba vinculada a una cuenta que no tenía nombre. Carly decidió solicitarle a su jefe información de las personas que habían estado en la habitación.
Luego de terminar su jornada laboral, Carly se fue al banco a investigar más a fondo. Ella al llegar se acercó al mostrador. Pensaba en actuar como si no pasara nada, solo entregar esa carpeta. La cajera se llama Dana y ella le pidió la tarjeta bancaria de Carly luego de que le entregase la carpeta.
Carly tenía la tarjeta con ella, así que se la dio y contuvo su respiración, cuando de repente Dana dijo: “¿Quieres abrir tu caja de seguridad?”, a lo que Carly respondió de inmediato que “¡Sí!”. Dana y Carly se dirigieron a una gran sala y entraron.
Allí estaban dos guardias de seguridad bastante armados que vigilaban las cajas. La empleada se acercó a una de ellas y giro la llave simultáneamente y la caja se abrió de un solo clic. Dana le entrego la caja mientras dejaba a Carly sola con los dos guardias.
Cuando Carly abrió el sobre que contenía la caja, se encontró un montón de dinero y un billete de avión y de inmediato le envió un mensaje a su tío que decía “¡Muchas gracias! Pero ¿Por qué no me puedes dar el dinero como lo hacen las personas normales? Tío estás loco”.