Para tener un ambiente agradable y profesional en un negocio, el orden y la limpieza es fundamental. Sin embargo, la técnica de barrido de adentro hacia afuera, comúnmente practicada en muchos hogares, no siempre es la mejor estrategia en un entorno comercial.
En esta nota encontrarás las razones para no barrer de adentro hacia afuera, puede ser lo peor que hagas.
Contaminación cruzada.
Al barrer de adentro hacia afuera, puede transportar la suciedad y el polvo del interior del negocio a áreas ya limpias. Lo que resulta en contaminación cruzada. Las partículas de suciedad están esparcidas por todo el lugar. Dificultando el mantenimiento.
Mala suerte.
Se dice que entre emprendedores es una regla de oro. Pues barrer de dentro hacia afuera significa que sacas todo lo bueno que tendrás. Estás ahuyentando la buena suerte.
Imagen profesional.
En un entorno empresarial, la apariencia es crucial. El barrido de fuera hacia dentro garantiza que las zonas públicas estén limpias y ordenadas, contribuyendo a una imagen más profesional y cuidada. Clientes y colaboradores perciben un ambiente limpio como reflejo de la atención y cuidado brindado en todos los aspectos del negocio.
Entrada principal en óptimo mantenimiento.
La entrada principal es la fachada del negocio. Lo primero que ven tus clientes es el negocio, barriendo de adentro hacia afuera harás que se acumule más sociedad en la zona de mayor tránsito de personas.
Seguridad:
Barrer de adentro hacia afuera puede aumentar el riesgo de accidentes, ya que la suciedad y el polvo pueden esparcirse en áreas donde los empleados y clientes viajan con frecuencia. Barrer de fuera hacia dentro minimiza este riesgo al concentrar la suciedad en las zonas menos transitadas, facilitando su control y limpieza.