Hay una cosa importante sobre ser madre que probablemente no sabías, son los niños quienes eligen a sus padres. Sí, así es, tu hijo te ha elegido para estar en su vientre, uniendo su alma a la tuya.
Durante este viaje, las almas transitan por experiencias que no podemos recordar, generando una conexión incluso antes de nacer. Almas unidas para siempre.
Te invitamos a esta hermosa reflexión sobre la maternidad:
“Un día como hoy llegaste a este plano a través de mí, no me alcanzarían las palabras para decirte todo lo que ha sido esta experiencia, todas las emociones y sensaciones que me habitan desde que descubrí que estabas en mi barriga.
Estás creciendo tan rápido, manteniendo intacta esa mirada que encierra inocencia, ganas de descubrir el mundo y sobre todo mucho amor. Pero te digo que tú no estás creciendo sola, yo estoy haciendo lo mismo, porque tu vida representa el período en el que, a base de prueba y error, me he desarrollado como madre».
“Quiero que recuerdes siempre, más que nada, que el propósito de la vida no es otro que ser feliz. En tu camino habrá de todo; caras tristes, caras felices, pero solo tú decides cómo vivir, qué tomar para ti y qué dejar ir. Haz que tu balance sea siempre positivo, vive cada momento, sin añorar el mañana.
No pierdas el tiempo en nada que te robe la paz. Haz lo que te haga vibrar el alma y lo demás vendrá por añadidura. No dependas de nada ni de nadie, la energía creativa reside justo dentro de ti, tomando conciencia de ella, lo tienes todo.
“Piensa hermoso y tu vida será así, lo que anida en tu mente terminará convirtiéndose en parte de ti, no solo en pensamientos, sino en experiencias. Silencia tu mente de vez en cuando y escucha tu esencia, desde allí aclararás cualquier duda que puedas tener.
Sé agradecido, son los mejores cristales con los que podemos ver la vida, cuanto más agradezcas por tus bendiciones, más te llegarán. Agradecer es la mejor manera de pedir.
El amor trasciende hijita mía y une a los que se aman por toda la eternidad. Te amo sobre todas las cosas, sin condiciones, sin importar lo que hagas o dejes de hacer. Estoy infinitamente agradecida con la vida por darme la oportunidad de ser madre y sobre todo de ser tuya. Agradezco y honro nuestros acuerdos… los que están grabados en nuestros corazones.”
“No niego que no es tentador meterse en una burbuja y protegerse de todo lo malo, lo que te puede hacer sufrir, pero eso es limitarte, es robarte experiencias y si me elegiste a mí para este tránsito, lo mejor que puedo hacer es amarte, apoyarte y respetarte no estoy aquí para trazar tu camino, aunque quisiera acompañarte en tus pasos.
Gracias por ser parte de mí, amado hijo. Mi vida es mucho más bonita desde que estás tú en ella. Perdona mis errores, aquí estoy aprendiendo a tu lado, pero dando lo mejor de mí para dar lo mejor de mí. Me encantaría poder compartir muchos cumpleaños más contigo y seguir conociéndote y enamorándome cada día más de ti.”
Fuente consultada: paradigma terrestre
¿Qué te parece esta hermosa reflexión sobre la maternidad?